05 Jul GANADERÍA CON LA BIODIVERSIDAD

La actividad económica más destacada de Picos de Europa es la ganadería en explotación extensiva, un aprovechamiento que puede contribuir a la biodiversidad de los ecosistemas acuáticos de montaña como mostramos en el último boletín trimestral DIVAQUA.

En el nuevo boletín DIVAQUA se pone de manifiesto que la ganadería, como principal actividad económica de Picos de Europa, puede ser también un poderoso aliado de conservación si sus ancestrales prácticas pastoriles ligadas al agua se hacen sostenible para convivir con la biodiversidad del parque nacional.

Además de favorecer la estabilidad en el uso del territorio, la ganadería es motor económico esencial de Picos de Europa donde hay un escaso aprovechamiento del suelo mediante cultivos debido a los acusados desniveles.

Ganadería y ecosistemas acuáticos

La ancestral práctica pastoril conlleva el uso estrecho de los cuerpos de agua, que a su vez resultan soporte vital para los hábitats y especies ligados a los ecosistemas acuáticos continentales. El mantenimiento de sus condiciones naturales resulta esencial para la biodiversidad ligada al agua tanto como para favorecer un aprovechamiento sostenible mediante una actividad productiva ganadera que consolida una economía rural basada en los servicios que prestan los ecosistemas.

Minimizar la presión del ganado

La presión que la actividad ganadera ocasiona en humedales, ríos y lagos de montaña puede adecuarse mediante una gestión que minimice los efectos del ganado sobre el medio acuático y sus comunidades biológicas.  

Asimismo mantener las condiciones naturales del agua de montaña, presente en los diferentes ecosistemas acuáticos continentales, es garantía saludable tanto para los rebaños como para los seres vivos que habitan sus ecosistemas. De este modo se favorece la conectividad hidrológica que, a la vez que permite un uso antrópico ligado al desarrollo rural de Picos de Europa comprometido con la conservación de sus ecosistemas y la biodiversidad que albergan.

Abrevaderos de montaña sostenibles

La adecuación y mejora de los abrevaderos de montaña para disponer de agua permanente, el cierre perimetral estacional de algunos humedales especialmente sensibles a la sobrecarga ganadera y sus efectos como el pisoteo y la abstracción de agua reducen su vulnerabilidad frente a la presión antrópica. Es un efecto positivo sobre dichos ecosistemas lénticos que resultan primordiales para la biodiversidad por ser refugio de importantes poblaciones de anfibios de interés comunitario. Fauna que también se verá beneficiada por la restauración de manantiales y de numerosos abrevaderos de montaña, ya que actualmente actúan como una trampa cuando los anfibios que acuden a ellos para realizar su puesta quedan atrapados por la ausencia de rampas que faciliten su salida.

Patrimonio cultural de Picos de Europa

El quehacer pastoril es la base económica de los pueblos y esencia del patrimonio cultural de Picos de Europa. Es la manera en que el hombre se ha adaptado a las montañas y sus cambios durante el paso de las estaciones. Mientras que los fondos de valle se emplean durante el verano para la obtención de forraje para alimentar al ganado en invierno, los pastos de montaña son jugoso bocado que, desde abril y hasta finales de verano, nutre a la cabaña ganadera desplazada en una migración altitudinal.

Conectividad hidrológica

Si esta práctica pastoril contribuye a mantener las características naturales de los ecosistemas acuáticos de montaña fomentará la conectividad hidrológica y al mismo tiempo compatibilizará los usos antrópicos con la conservación de la fauna y la flora silvestre. Es el camino para un desarrollo rural sostenible que involucre conservación de hábitats y diversidad biológica con el desarrollo socioeconómico basado en actividades productivas fundamentales para la supervivencia del medio rural. Conservando el paisaje se genera, además de diferenciación de los productos derivados de una ganadería extensiva con trazabilidad, servicios ambientales y sociales como los  educativos, culturales y turísticos. 

El proyecto europeo LIFE18 NAT/ES/000121 DIVAQUA está coordinado por la Universidad de Cantabria a través del Instituto de Hidráulica Ambiental. Cuenta con la contribución financiera del Programa LIFE de la Unión Europea y lo cofinancia la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria.

Son socios beneficiarios del proyecto Red Cambera, Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Centro Tecnológico Agrario y Agroalimentario Itagra.CT, Repsol, la Fundación Instituto de Hidráulica Ambiental Cantabria. Además de los Gobiernos autonómicos del Principado de Asturias y la Junta de Castilla y León.