15 Sep RIOS CON FUTURO

Derribar obstáculos transversales de los ríos que están fuera de servicio, tales como azudes en su día empleados para molinos, ferrerías o aprovechamiento hidroeléctrico, facilita que ríos como el Deva y el Bullón recuperen la conexión de sus ecosistemas acuáticos.

La elevada biodiversidad y gran valor ecológico que acoge Picos de Europa va a incrementar su dimensión ambiental gracias a las mejoras en la conectividad longitudinal de los ríos Deva y Bullón que va a provocar la demolición de azudes en desuso. Tarea que actualmente LIFE DIVAQUA está llevando a cabo en los cauces de los ríos Deva, a su paso por Potes, y Bullón, en las proximidades de Ojedo.

Los azudes son infraestructuras con cuya desaparición o eliminación parcial se va a minimizar el efecto que ocasionan en la continuidad del medio acuático gracias a la eliminación de la barrera física que suponen para la movilidad de sus comunidades biológicas. En el caso del azul del río Deva la permeabilización se realiza en dos fases separadas en el tiempo para que se analice la evolución de la cuña de sedimentos y de los márgenes fluviales laterales tal y como recomienda la Confederación Hidrográfica del Cantábrico debido a su proximidad al núcleo urbano de Potes.

La fase 1 que se acaba de realizar consiste en la demolición parcial del azud desde su nivel actual hasta una cota de 1 metro. En la fase 2, a desarrollar el próximo año, se procederá a la demolición total del azud restante hasta alcanzar la cota de 0 metros. En el caso del azud de la ferrería de Ojedo en el río Bullón, la demolición se hará completa en los próximos días.

Los ríos españoles con más obstáculos fluviales

Históricamente la dinámica de los ríos se ha visto alterada por las intervenciones humanas para el aprovechamiento del agua. La creación de obstáculos físicos tales como azudes origina un impacto para la biodiversidad. Con el paso de los años, cuando estas barreras físicas pierden su función quedan obsoletas por su abandono y deterioro tras la caducidad de la concesión. No obstante permanecen en pie como una frontera para la dinámica natural del río así como para la movilidad de la fauna de los ecosistemas acuáticos. En la actualidad, el territorio español es una de las áreas europeas con más obstáculos fluviales en desuso.

Europa restaura las condiciones naturales de sus ríos

Según la Directiva Marco del Agua, ante el abandono de dichas instalaciones debe cumplirse con el desmantelamiento de las mismas, mediante demolición parcial o total con el fin de restaurar el caudal ecológico de los cursos fluviales sobre todo de aquellos que se encuentran en Red Natura 2000. Para lograrlo han de aplicarse las directrices de la Estrategia Nacional de Restauración de Ríos. Siendo los azudes demolidos cada año uno de sus principales indicadores. Los proyectos LIFE+ de la Unión Europea, tales como LIFE DIVAQUA, son uno de los principales financiadores de dichas actuaciones.

Gracias a la demolición de los obstáculos fluviales se aumenta el área de distribución de especies y hábitats de interés comunitario como el salmón del Atlántico (Salmo salar). Así podrá alcanzar un favorable estado de conservación al mejorar las condiciones ambientales de una de las más importantes cuencas salmoneras de la vertiente cantábrica como es la del Deva-Cares.

Actuaciones por la Red Natura 2000

Siguiendo las directrices del Marco de Acción Prioritaria para la Red Natura 2000 la eliminación de los azudes incide en una restauración de los ecosistemas fluviales que va a facilitar las mejoras en la conectividad y naturalidad del medio acuático y de las especies que lo habitan. Medida que facilita la recuperación del régimen hidrológico natural del río y con ello la alta conectividad y la dinámica natural de erosión y sedimentación fluvial. Asimismo tales actuaciones inciden de manera directa en implementar el desarrollo de los corredores ecológicos de la propia Red Natura 2000.

Colaborar por los ecosistemas acuáticos

La demolición de los azudes ha sido coordinada por el Centro Tecnológico Agrario y Agroalimentario Itagra.CT y Red Cambera, socios beneficiarios del proyecto junto al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Repsol, la Fundación Instituto de Hidráulica Ambiental Cantabria y los Gobiernos autonómicos del Principado de Asturias y la Junta de Castilla y León,

La ejecución de obra la realiza Construcciones Hidráulicas Bercianas “COHIBER, S.L.” bajo supervisión de los agentes del Medio Natural del Gobierno de Cantabria y de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico. Además cuenta con la colaboración de los Ayuntamientos de Potes y Cabezón de Liébana, así como de los vecinos y propietarios del territorio.

El proyecto europeo LIFE18 NAT/ES/000121 DIVAQUA está coordinado por la Universidad de Cantabria a través del Instituto de Hidráulica Ambiental. Lo cofinancian la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria y Navarro Generación y dispone de la contribución financiera del Programa LIFE de la Unión Europea.